miércoles, 25 de mayo de 2011

"La Forma y el Contenido":

En diferentes ocasiones, nos situamos frente a un otro con el fin de expresarle nuestros puntos de vista, nuestros pareceres, nuestras opiniones, nuestros sentimientos y tal vez pensando solo en lo que nos sucede, nos olvidamos que del otro lado se encuentra una persona dispuesta o no a recibir en ese momento lo que nosotros queremos expresar.

Obramos y actuamos en función a nuestra necesidad de decir, sin tener en cuenta si en  ese otro a quien nos dirigimos esta presente la predisposición para escucharnos y el estado de animo necesario para recibir lo que que queremos expresar.

En ese instante, somos solo nosotros, solo nosotros y nuestra necesidad, solo nosotros y ese impulso por poder exteriorizar todo aquello que nos sucede, apelando a la forma que creemos mas conveniente, sin tampoco pensar si es la mas adecuada para quien lo recibe.

Dejamos de lado los tamices y nos olvidamos si en ese momento es bueno o necesario, porque solo pensamos en nosotros, en nuestras emociones, y tal vez sin desearlo, lastimamos, herimos, incomodamos. Pero no por expresarnos, sino por no buscar la manera adecuada para hacerlo.

En consecuencia, todo se distorsiona y muy probablemente nuestro mensaje pierde el sentido original porque produce en el que lo recibe un efecto diferente al que le quisimos otorgar.

La forma y el contenido van de la mano, lograr el equilibrio entre ambos sera tarea de cada uno de nosotros.

Podemos decir todo lo que queramos decir, pero apelando a la manera mas adecuada, basada en el respeto por el otro y desde un lugar mas empatico que nos permita comprender que frente nuestro existe un ser humano que siente y que vivencia de la misma manera en que nosotros lo hacemos.