EL LENGUAJE DEL CUERPO:

 

"ES IMPOSIBLE NO COMUNICARSE"

Paul Watzlawick, uno de los primeros autores de la Teoría de la Comunicación Humana, sostiene y define que en todo proceso de comunicación existen cinco Axiomas, ya que se consideran Axiomas porque su cumplimiento es indefectible, es decir que reflejan condiciones de hecho en la comunicación humana que nunca se hallan ausentes.

 

El primero de estos axiomas y como el tíitulo del presente artículo así lo expresa, es precisamente: Es Imposible no Comunicarse.

 

Y cuanta certeza  tiene esta afirmación, ya que los seres humanos no solo nos comunicamos a través de las palabras sino también por medio de nuestro lenguaje corporal y gestual, es decir que siempre y sin excepción nos estamos comunicando.

 

Generalmente, nos manifestamos en un 30% en forma verbal y en un 70% de manera no verbal, expresando sentimientos, emociones e intenciones, las cuales ofrecen un caudal importante de información.

 

En consecuencia, con caráctristicas bien definidas  el Lenguaje no Verbal adopta una importante significación, ocupando un lugar de relevancia en todo proceso de interacción ya que no es propio de un ambito específico sino que esta presente en cualquier contexto de relación.

 

En los últimos años el estudio del Lenguaje no Verbal comenzó a vislumbrarse como una  temática relevante e importante dentro del ámbito de las relaciones interpersonales, sin embargo, la comunicación no verbal o Lenguaje no Verbal, es tan antigua como la humanidad misma y más aun teniendo en cuenta que el hombre primitivo antes de desarrollar la capacidad del habla se comunicaba a través de lo gestual y lo corporal.

 A lo largo del tiempo,  investigadores y estudiosos de diferentes áreas y profesiones, se han abocado a la profundización de su estudio, otorgándole a ese sin fin de gestos, expresiones, actitudes, posturas, una brillante estructuración, la que permitió  que hoy se pueda hablar del Lenguaje o comunicación no Verbal, de una manera ordenada y fundamentada no solamente desde hechos empíricos sino también de comprobaciones científicas que respaldan y avalan el origen y el porqué de dichas manifestaciones y expresiones.

 

Somos parte responsable de procesos interaccionales, por tal motivo conocer a cerca de su importancia se transforma en un elemento escencial para el establecimiento de relaciones positivas, asertivas y productivas.

 

 

 Clr. Marcelo Peralta